Por Agencia EFE hace 7 horas
El Paso (EE.UU.), 24 ene (EFE).- Uno de los testigos en el caso que se le sigue en Estados Unidos al anticastrista Luis Posada Carriles por presuntamente haber mentido durante su proceso de solicitud de naturalización en abril de 2006 declaró hoy que éste no habría entrado al país por la frontera sur, como aseguró en su momento.
El testimonio del testigo, Gilberto Abascal, sostiene que el exiliado, enemigo acérrimo de Fidel Castro, entró vía Isla Mujeres (México) a Miami abordo de la embarcación La Santrina y acompañado de otras cinco personas, entre ellas el mismo Abascal, y no por la vía Matamoros (México) y Brownsville (Texas).
Abascal señaló que una tripulación integrada por Santiago Álvarez, Osvaldo Mitat, José Pujol, Raúl López Castro y él mismo partieron de las Bahamas hasta Isla Mujeres, en donde habrían recogido al anticastrista.
Explicó que tras dos días de viaje abordo de la embarcación La Santrina, y ya en Isla Mujeres, la embarcación se habría atascado a su arribo en un banco de arena, por lo que llegaron a la misma soldados del ejército mexicano y autoridades de inmigración que levantaron datos y solicitaron a los tripulantes su pasaporte.
"Yo estaba preocupado porque llegaron con perros, buzos y periodistas y registraron la nave", expuso Abascal quien indicó que Álvarez se ausentó cuatro horas del barco y regresó con tres hombres, uno de ellos Ernesto Abreu, Posada Carriles y otro más al que dijo no conocía.
Abascal afirmó que Álvarez llegó en un carro de golf, en el que tanto el cómo Raúl López Castro, Osvaldo Mitat y José Pujol acompañaron al acusado a buscar una peluquería que finalmente encontraron y en la que este último se cortó el cabello.
La fiscalía presentó una serie de fotos de Álvarez, Pujol, López Castro, Abascal en el puerto y una más de Posada Carriles en la barbería mientras le cortaban el cabello. Las fotos, dijo, las tomó López Castro con una cámara de Álvarez.
Abascal señala que sintió que unos fotógrafos los seguían desde que desembarcaron y que les tomaban fotos en todo momento.
"Yo le dije a Álvarez (durante la cena) que unos señores mexicanos nos estaban vigilando, pero él me dijo que yo siempre veía visiones", señaló.
Añadió que en algún momento él se sintió mal con la presencia de Posada y pensó en "tomar un avión" e irse, pero dice que tuvo miedo de que el resto de la tripulación pensara que era un informante.
Expuso que cuando salieron de Isla Mujeres al siguiente día en la tripulación se encontraba Posada Carriles, y tras hacer un breve alto en aguas de Bahamas siguieron su rumbo hasta llegar a Miami, en donde Álvarez les pidió las cámaras desechables con las que tomaron las fotografías de su trayecto.
Posada Carriles se enfrenta a once cargos por fraude y perjurio, acusado de haber mentido en repetidas ocasiones a las autoridades migratorias, buscando la permanencia legal en el país.
Durante el juicio se analizará también su participación en los bombazos a la isla de Cuba en 1997 que el negó durante su solicitud de asilo político en el 2005.
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