Por: El Duende
Un “Castro” tejano junto a Obama.
Se llama Julián. Julián Castro, Alcalde de la ciudad tejana de San Antonio que será el orador principal en la Convención del Partido Demócrata que postulará de nuevo a Barack Obama como candidato a la presidencia de Estados Unidos en las elecciones del próximo mes de noviembre.
Escoger a un hispano como orador central en la convención nacional del Partido Demócrata demuestra la importancia que tiene el voto latino en las próximas elecciones norteamericanas, a la vez que constituye un paso de avance en la carrera política del joven Alcalde de San Antonio, ya que vale señalar que el Presidente Barack Obama también había sido el orador principal de una Convención Demócrata antes de ser después postulado para la presidencia de su país en la convención siguiente.
Este Castro tejano nunca ha estado de visita en Cuba pero de “ La Habana Vieja” algo debe saber, porque no hace apenas dos meses presidió un acto en la Universidad tejana de San Antonio en el que el conferencista invitado era el doctor Eusebio Leal Historiador de la Ciudad de La Habana. Ojo con este Castro tejano que puede llegar muy lejos.
Revienta la cloaca del canal 41
Ya salió al aire la noticia de que el presentador de televisión Fernando Hidalgo con sus mamboletas bailantes se mudó del Canal Cloaca 41 para tomar refugio en la otra Cloaca de la tele local, el Canal 22 Mega TV propiedad del “Alacrán “ Alarcón.
Todo hace indicar que Fernando Hidalgo que ha sido el primero, ni será el último de los artistas, periodistas y técnicos de televisión que se vean obligados a tomar nuevos rumbos a partir del próximo 13 de agosto en que la frecuencia del Canal 41, que ahora emite la señal de América TV pase a ser el eslabón miamense de la nueva Cadena hispana de Estados Unidos que con el nombre de “Mundo-Fox”, saldrá al aire con una nueva programación de carácter nacional para competir con Telemundo y Univisión.
Por los predios del Canal Cloaca América TV ya ha cundido el pánico. Los que allí trabajan están “embarcados” y no saben qué hacer. Fernando Hidalgo, que es chiquito de tamaño pero que de bobo no tiene un pelo, se tiró por la borda del barco en peligro , antes de que se produzca el naufragio final. Hidalgo no se creyó el cuento del argentino Romay – el dueño de la Cloaca- de que vienen tiempos mejores cuando la señal de América TV salga al aire por un canalito menor, de poca potencia y audiencia menor.
La debacle le viene encima el trece de agosto a la Cloaca América TV. Y el tibor sin asa estará diciendo ¿Donde me pongo donde me pongo?
Otro cubano al Senado de USA.
No nació en Cuba pero Ted Cruz, tejano por nacimiento pero hijo de cubanos que emigraron a Estados Unidos en la década de los años 50 igual que la familia del Senador Republicano de La Florida Marco Rubio, también dice sentirse cubano aunque por su filosofía ultraconservadora hará en el Capitolio todo lo que pueda para hacerle la vida imposible a los cubanos de la isla.
A Cruz se la considera, como a Marco Rubio, un hijo del “ Tea Party” el movimiento ultra-conservador que está avanzando cada vez más en los cuadros del Partido Republicano desplazando a los candidatos moderados como en el caso del Estado de Tejas, donde este cubano-americano de derechas derrotó en las elecciones Primarias a un contrincante del clan Bush del ala moderada de ese Partido.
Cruz será seguramente electo al Senado en los comicios de noviembre para sumarse a los también cubano-americanos de la Cámara Alta, el Republicano Marco Rubio de La Florida- también favorito del Tea Party- y a Bob Menéndez, Demócrata por el Estado de New Jersey.
Cruz, cuyo padre se fue de Cuba en 1957 cuando la dictadura de Batista, ha hecho suyo el ideario más ortodoxo del “Tea Party”. En uno de sus discursos más sonados, pronunciado en el mes de octubre pasado dijo que: “Barack Obama es el presidente más radical que esta nación ha tenido. Es un devoto de su fe, y su fe es la del Gobierno, el control total del Gobierno de nuestras economías y nuestras vidas”.
Pocos senadores hay tan conservadores como Cruz en el Capitolio y cuatro de los 100 que allí prestan servicio están directamente relacionados con el “Tea Party”.Solo eran dos y parió Catana.
Los crímenes del Plan Cóndor.
En los tiempos de las dictaduras militares del Cono Sur del continente americano de la década de los años setenta, los asesinatos políticos y las desapariciones de ciudadanos opositores de los regímenes militares que gobernaban en Argentina, Chile, Paraguay, Brasil y Uruguay se realizaban bajo el siniestro “Plan Cóndor” supuestamente establecido para combatir el comunismo en América Latina con la asesoría técnica y política de la CIA norteamericana.
Los crímenes y desapariciones fueron entonces por miles. La mayoría de esas violaciones a los derechos humanos han quedado sin que se encuentren los cadáveres de las víctimas y sin el castigo debido de sus victimarios. Pero hay casos en que la verdad ha quedado al descubierto aún a pesar de los años transcurridos.
El diario Página 12 de Argentina acaba de publicar una amplia información sobre el hallazgo de los cadáveres de dos diplomáticos cubanos que aparecieron dentro de unos tanques de acero enterrados en una apartada zona de la ciudad de Buenos Aires cuya desaparición se había reportado en el año 1976 después de “desertar” de la Embajada cubana en la capital argentina supuestamente para vivir en el “mundo libre”. La verdad sale ahora a relucir en la información de la reportera Victoria Ginzberg del diario Pagina 12 que dice así:
El 11 de junio pasado, un grupo de chicos que cazaba ratones en un predio ubicado frente al aeródromo de San Fernando reparó en un barril de metal oxidado con capacidad para 200 litros. Estaba roto. Los chicos vieron huesos y llamaron al 911. La policía descubrió luego otros dos toneles similares que también tenían restos óseos. Después de analizarlos, se estableció que uno de los cuerpos pertenece a Crescencio Nicomedes Galañena Hernández, un diplomático cubano desaparecido el 9 de agosto de 1976.
Galañena Hernández fue secuestrado junto a Jesús Cejas Arias el 9 de agosto de 1976, en el barrio de Belgrano. Acababan de salir de la embajada cubana, donde trabajaban. Cuatro días después, el 13 de agosto, La Opinión publicó que “la embajada cubana en Buenos Aires estaba trabajando en estrecho contacto con el gobierno argentino en la búsqueda de dos miembros de la representación, acerca de quienes se presume que habrían sido secuestrados. Los dos hombres, Jesús Cejas Arias y Crescencio Galañena Hernández, integrantes ambos del personal administrativo de la embajada cubana, no habían sido vistos desde que salieron de la embajada ese lunes”. El 17 de agosto, en el mismo diario, se informó que “La agencia de noticias Associated Press recibió ayer un sobre, por correo simple y con estampilla argentina, conteniendo las credenciales de los empleados administrativos de la embajada de Cuba, cuyo texto en letra manuscrita y despareja dice: ‘Nosotros (Jesús Cejas Arias y Crescencio Galañena) ambos cubanos nos dirigimos a usted para que por este medio comunicar que hemos desertado de la embajada para gozar de la libertad del mundo occidental’, la nota no lleva firma al pie ni ninguna otra aclaración. La Cancillería argentina certificó la autenticidad de la credenciales”. De esta forma la dictadura argentina montó un operativo para hacer creer que los dos hombres habían abandonado el régimen cubano y no tener que dar explicaciones por la desaparición de dos diplomáticos.
Pero Cejas Arias y Galañena Hernández estaban cautivos en Automotores Orletti, el centro clandestino que fue en Buenos Aires sede del Plan Cóndor, es decir, de la coordinación represiva de las dictaduras del Cono Sur. Según una investigación del periodista norteamericano John Dinges, el agente de la CIA Michael Townley y el cubano-estadounidense Guillermo Novo Sampoll habrían viajado a la Argentina para interrogar a Cejas Arias y Galañena Hernández. “Ellos cooperaron en la tortura y el asesinato de los dos diplomáticos cubanos”, habría declarado ante la jueza María Servini de Cubría el represor Manuel Contreras Sepúlveda, ex jefe de la DINA, la policía secreta pinochetista. Townley fue el autor del asesinato en 1976 en Washington de Orlado Letelier, canciller de Salvador Allende,
Por el secuestro y la desaparición de Galañena Hernández y Cejas Arias ya fueron condenados en Argentina el general retirado Rodolfo Cabanillas, quien se desempeñó como jefe de la División de la SIDE “Operaciones Tácticas 18” (que correspondía a Orletti) y los represores Raúl Guglielminetti, Eduardo Alfredo Ruffo y Honorio Carlos Martínez Ruiz.
Aquí viene bien repetir la veja frase de “La justicia tarda, pero llega”.
Y hasta mañana amigos de El Duende que con mi gallo me voy cantando a mi tumba fría. Bambarambay.